Guerra en Ucrania enfrenta a las potencias occidentales contra Rusia
Aunque el mundo civilizado no esperaba que un diferendo de odio étnico, movilizara tantos recursos humanos estratégicos y una guerra desigual, desde el pasado mes de febrero, que destruye a su paso toda una sociedad milenaria, como lo es la ucraniana, es así como nos encontramos con el paradigma de quién detiene este conflicto bélico desigual.
Los ucranianos con 46 millones de habitantes, un territorio de 600 mil kilómetros cuadrados, un ejército minoritario 6 a1 a favor de Rusia, Moscú un blindaje armamentista superior en todos los aspectos, y una tecnología nuclear de última generación, este fenómeno, es lo que enfrenta Ucrania, contra la potencia rusa que m la invadió su territorio, sin haber agresión ni justificación alguna.
Rusia consciente de su superioridad armamentista y en la creencia de que contaba con un ejército invasor estratégico, valiente y bien entrenado, se llevó la sorpresa de que sus comandantes de guerra, caen como el efecto domino, en tres o cuatro semanas el Kremlin pierde más de una decena de comandantes de tropas, entre los cuáles figuran dos o tres mayores generales.
Qué puede explicar una pérdida humana de tal naturaleza. Que las tropas no tengan buen entrenamiento, y que los hombres seleccionados para dirigir a los soldados en los frentes de combates, no conocieran el terreno, o no contaran con los conocimientos que se necesitan para dirigir soldados contra soldados.
Puede que los comandantes caídos tuvieran la torpeza de confiarse en la superioridad numérica, o en la fama antigua de la lucha del Ejército Rojo, si fue así, su mentalidad burocrática le tronchó sus vidas.
En el caso del dictador expansionista Vladimir Putín hay que valorar su decisión de invadir a Ucrania, una nación vecina y hermana, sin que esta última hubiese agredido a Rusia.
Valorarla la agresión, no por la valentía de Putin, sino, por su actitud criminal y antihumana, que creyendo que la invasión iba ser una fiesta de fin de semana, le salió todo al revés, para poder poner un sello de victoria, tienen los rusos que destruir por completo al pueblo de Ucrania, con sus habitantes y con sus riquezas naturales.
Parece que eso ya no será posible, porque si Putin intenta
